Desde el IPEHCS expresamos nuestra profunda preocupación por el operativo de desalojo de la comunidad Lafken Winkul Mapu. A la escalada de violencia verbal, prejuicios y mentiras que se han venido vertiendo en distintos medios de comunicación y sectores políticos se suma el accionar desmedido de las fuerzas de seguridad que operan en la zona construyendo a una comunidad mapuche como enemigo interno. Se han detenido a menores de edad y se les sigue persiguiendo, produciendo una situación de peligro y de violencia.
Las fuerzas de seguridad nacionales y las fuerzas policiales provinciales actúan de forma desmedida sólo para reprimir a una comunidad en su reclamo territorial, ante la pasividad de las mismas autoridades que las conducen hacia otras apropiaciones privadas en la misma provincia, como en el caso de Lago Escondido, que cercenan el acceso de todxs lxs ciudadanxs a un espacio público.
Desde nuestro instituto necesitamos señalar esta arbitrariedad manifiesta que reproduce en nuestra sociedad estigmas sobre grupos sociales y pueblos originarios y los señala como responsables de un orden injusto, racista y que beneficia a los sectores de mayor poder económico.
Escribe: Dr. Walter Del Río - IPEHCS CONICET UNCo-